Tuvimos 2 noches agradables aquí, super recomendado. El hotel se encontraba super cerca de las afueras de la ciudad y del jardín y también de restaurantes. Menos mal mi habitación era de buen tamaño y barata, con una cama confortable. Una ubicación muy buena, la mejor y cómoda para visitar Ballons des Vosges Nature Park, que se encuentra a unos 10-15 minutos a pie del hotel. Además, estaba muy cerca de la estación de trenes.

Un hotel lindo, habitaciones impecables y un personal agradable. Habitaciones con una cama cómoda...

La habitación era muy espaciosa con una cama confortable, todo era de primera clase. Ubicación: el hotel estaba en las proximidades del jardín. Unas cuantas veces comí en L'Abbaye d'Anny, situado a un agradable paseo del hotel;)))

Pasé un tiempo agradable y recomendaría este lugar, el desayuno con pan fresco, jamón y queso fue genial.

Amabilidad y atencion de los propietarios. Limpieza. Tranquilidad. Relacion calidad_ precio

La amabilidad de la persona que gobierna el hotel, nos dio toda clase de explicaciones para hacer visitas por los alrededores, incluso nos ayudo a buscar restaurante el dia de nuestra llegada, estaba siempre atenta y amable con nosotros.La limpieza, incluso aseo comun de la sala de estar estaba limpísimo.

Solo advertir que, como es lógico por el tipo de hotel, no hay escaleras y si tienes que subir los dos pisos con maleta, cuesta un poco

La habitación era de buen tamaño y tenía una cama cómoda. Había una ducha, secador de pelo y toallas en el baño. La ubicación del hotel era ideal, cerca del centro. El Hotel Deybach en Munster ofrece habitaciones espaciosas con camas cómodas, baños equipados con ducha, secador de pelo y toallas, y una ubicación conveniente cerca del centro de la ciudad. ¡Además, se encuentra cerca de encantadores lugares como la Patisserie Cafe Meyer, ideal para disfrutar de bebidas calientes!

La tranquilidad que se respira y lo agradables que son la familia que lo regentan.

El desayuno incluye queso y bollería.

Este hotel es una excelente opción para alojarse en la ciudad. El precio es muy justo y ofrece una gran relación calidad-precio. Además, el personal es amable y siempre está dispuesto a ayudar en todo lo que necesites. Las habitaciones son cómodas, con camas muy confortables que te garantizan un buen descanso. Además, el desayuno es estupendo, con una variedad de productos locales que te harán disfrutar cada mañana.

No hay ningún aspecto negativo que destacar, todo ha estado bien.

Las habitaciones son lo suficientemente espaciosas y tienen una cama cómoda. El desayuno era abundante, sabroso, con jamón, pan fresco y queso. La ubicación del hotel es conveniente, justo al lado del centro y de un jardín.

No hay nada comparado con este hotel bien cuidado y lindo. Recomendaría este lugar. El personal es muy atento. El desayuno sabroso. La ubicación ideal, justo al lado de las montañas, de una estación de tren y de actividades de la zona. Una habitación barata y lo suficientemente espaciosa con un baño grande. Un baño bien equipado con una bañera.

Queríamos visitar el Monumento Albert Schweitzer en Munster y elegimos el Hotel Deybach debido a su buena ubicación. Nos sorprendió gratamente poder hacer uso de comodidades como el acceso gratuito a Internet inalámbrico y la asistencia turística. Disfrutamos especialmente de la gran variedad de restaurantes de calidad en el centro de la ciudad, a solo 1 km del hotel, que ofrecían opciones para todos los gustos y presupuestos. nos encantó descubrir el queso tradicional Munster en los puestos de los agricultores y disfrutar de nuevos paisajes, fauna y flora, tranquilidad y espacio.

No se incluyó el desayuno en el precio y el wifi tenía algunos problemas, aunque no fue un gran problema para nosotros, ya que buscábamos desconectarnos y solo necesitábamos utilizarlo para buscar información sobre lugares interesantes para visitar.

Nos alojamos en un hotel muy acogedor y bien situado. Estaba muy cerca de la estación de tren y de la zona céntrica de la ciudad. Las habitaciones eran impecables, con unas sábanas blancas y limpias. La amabilidad de los propietarios hizo que nuestra estancia fuera aún mejor. Además, el desayuno era estupendo, con unos croissants deliciosos.

Quizás la única pega fue la falta de ascensor, aunque solo era un piso y no fue un gran problema para nosotros.

Desayuno estupendo con croissants superbuenos. Atención de la propietaria Sabine.- Decoración navideña hogareña y confortable.- Sábanas blancas impecables.- Limpieza de la habitación exquisita.

Es difícil recordar algo.